No me
cuentes más historias de amores y pasiones por las jaras que a día de hoy ya no
me creo nada. No empieces de nuevo y calla, te lo pide un corazón quemado y
cansado de tanta falsa.
Hoy no
siento igual que ayer, el pisar tus piedras gastadas esa necesidad de gritarte
entre las jaras. ¿Qué queda cuando el amor se acaba? sentada después de una
temporada larga, intensa en momentos de ladras y dura en recogidas amargas, una
temporada que finiquito, dejando al alma con ganas de más y al cuerpo pidiendo
que acabara.
Pasan
los años y me pregunto, si he pasado tantas horas entre sonidos de caracola que
ya no siento con la misma inquietud que
cuando me robaron mi primer aliento. Quizá sea solo culpa mía, ya no miro con inocencia el amor que los
lentiscos a voces calladas me regalaban.
En esta
ruptura decir, que es mi corazón el mayor de los culpables, pues a ti Montería
te lo regale todo, te lo entregue todo: Mis amaneceres nerviosos, las suelas de
mis botas gastadas, el roce de mis zahones curtidos…te di mis caricias de manos
suaves pero duras, mis te quiero gritados en forma de ladras y hoy ya no siento
nada.
Y
buscando una explicación decirte, que me gustaría poder pasar los días
culpándome, diciéndome a mi misma que espere demasiado, me hice falsas
esperanzas, soñé tanto que me devolvías el amor que yo te procesaba que como la
perdiz cegada por el canto del reclamo me deje llevar hasta tu plaza, donde tu Montería
libertina y falsa, me esperabas con el arma cargada.
No es
justo por tu parte, que castigues a la que tanto amor incondicional te ha
procesado, esperaba de ti tan solo, un trato mas humano una caricia de vez en
cuando , un gracias por un trabajo bien realizado. Yo que solo te pedía Montería,
una ladra de vez en cuando, un arroyon inesperado y un agarre que alguna vez
nuestro amor hiciese oler a sangre. ¿Qué
trabajo te costaba seguir dándome a cambio de mi esfuerzo dos satisfacciones
casi involuntarias?
Ha sido
culpa de las dos Monteria, mía por dar de mas y tuya por no dar casi nada. Te
han quitado con los años, las ganas de quererme entre tus jaras, te van
quitando poco a poco la ilusión por ver a los campaneros quebrar las jaras, te
van dejando amor mío cada dia un poco mas sola y un poco mas hundida.
Aun
estamos a tiempo, de no dejarnos por completo. Aprovechemos este tiempo de
veda, para recapacitar y darnos cuenta que igual que yo necesito tus jaras tú
necesitas mis manos quebrándolas al paso, que con la misma intensidad que yo tengo
que gritarte “te quiero” tu necesitas mi aliento, no dejemos Montería mía, que
ese caballero de apellido € se interponga entre nosotras y termine de un
plumazo con esa amor caliente, paciente y romántico que durante tantos años nos hemos procesado.
No lo
permitamos, sentémonos del mismo lado y gritemos al mundo entero, al mundo
montero y perrero que tu si mi y yo sin ti, no somos nada.
Recuperemos
la pasión de antaño, esa en la que mirar de reojo era necesario. Volvamos a
desearnos igual que lo hicimos el primer día que nos rozamos, acariciemos con
la misma lujuria que en aquel tiempo hizo de nuestro amor delito, simplemente
regresemos dándonos el respeto que ambas partes necesitamos para ser hoy y
siempre, tu y yo, montería y rehala esa pareja perfecta que con sus altibajos
sepan apoyándose ,hacer frente a los indeseables que quieran degradarnos, siendo buitres que se aprovechan de nuestros
ratos de flaqueza.
Que
empecé a escribirte estas líneas, pensando en abandonarte y antes de acabar ya
me he dado cuenta, que un amor como el nuestro no puede tener final, no puede
dejarse abatir, no puede siempre que sigamos siendo tu y yo, yo y tu,
necesarias e irremplazables.
Aprendamos
a seguir necesitándonos, a seguir amándonos.
Atentamente,
“la
Rehala”
(*públicado en revista JyS columna "cuando el monte susurra" numero de Abril )
Precioso comentario y con mucha razon en todo lo que dices pero no te desesperes que los amores que mas se quieren son los que mas dificultades te hacen pasar porque seria todo muy monotono si siempre fuera todo igual, no te desesperes que en todo la vida hay siempre alguna alegria, ya veras como te premia co algun agarre a un cochino bueno y no es todo malo. UN SALUDO
ResponderEliminarCuanta razon tienes, me he visto en la misma situacion que tu, y lo único que mantiene viva la llama no es si no recordar quien me enseño a cazar y a quien estoy en señando yo ahora.
ResponderEliminarEl simbolo del € ahora, antes Pts. pero siempre destruyendo lo que toca.
Es cierto que la monteria nuca ha estado al alcance de todos, pero lo que si es cierto que pasó tiempo atras de ser una noble aficion a ser un negocio, unos lo usan para pagarse su buenas fincas a costa de engaños, otros como medio de vida, pero donde este el dinero siempre habrá podredumbre.
Por eso te digo, que recordar que fué mi padre quien me enseño todo lo que sé sobre la caza y que ahora son mis hijos los que aprenden todo aquello que mi padre me ha enseñado, es lo me mantiene en vilo, espeerando que llegue la nueva temporada.
Un saludo.
Ana, me entristece ver que siempre tiene que aparecer el interés y la corrupción en todo lo que el hombre toca con su mano destructora...lo siento por tí y por todas esas personas que disfrutan de las monterías y de todo lo que conlleva este mundillo, que aunque yo no participo de él, respeto y comprendo a todos los que disfrutais con ello... sigue disfrutando con los momentos positivos y sigue transmitiendonoslo a los que leemos tus escritos.... para mi eres una valiente y una campeona...
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